Por este sacramento, el bautizado se fortalece con el don del Espíritu Santo. Se consigue un arraigo más profundo en la filiación divina, se une más íntimamente con la Iglesia, fortaleciéndose por ser testigo de Jesucristo, de palabra y obra. En nuestras parroquias tenemos diferentes vías para recibir el sacramento de la confirmación.
La vía de la catequesis de niños y jóvenes
Una vez hecha la Primera Comunión, continuar el proceso catequético y acabar recibiendo el sacramento de la Confirmación
La catequesis de jóvenes
Con un grupo de jóvenes de 14 o 15 años de edad que quieran realizar un proceso de preparación para recibir el sacramento.
La catequesis de adultos
Mayores de edad que no estén confirmados y quieran recibir el sacramento formando parte de un grupo de catecumenado de adultos.